La causa de las cosas que ocurren en nuestra experiencia cotidiana nose encuentra en los demás, no está fuera de nosotros, sino dentro.Durante nuestros primeros años de vida, el estado emocional de laspersonas que son responsables de nosotros nos deja una huella. Sussentimientos se superponen a la esencia de quienes somos, de maneraque aprendemos a comportarnos como ellas en lugar de crecer paraconvertirnos en nosotros mismos. En La alquimia del corazón, se nospide que seamos conscientes de la forma en que esas huellas segrabaron en nosotros y cómo influyen en nuestro comportamiento. Paracorregir este rumbo debemos seguir al corazón. A través de sulenguaje, el corazón nos permite reeducarnos y nos libera de maneraincondicional al amor. El corazón es nuestro puente a la dimensiónvibracional de la realidad, que es experimentada como consciencia.Este viaje consiste en permitirnos sentir la vida en todo momento, enestar presentes y despiertos siempre. Es una oportunidad única paraparticipar de manera activa, responsable y creativa en nuestras vidas.